lunes, 31 de mayo de 2010

Los segundos de un minuto

Image: graur razvan ionut

Cualquier día antes de ir al cine o salir con los amigos …

-“Cariño, llegamos tarde, ¿cuánto te queda?”
-“¡Cinco minutos y ya salgo!”
- “Sí, pero ¿cuántos segundos tienen tus minutos esta vez…?”

Creo que mi novia comprende perfectamente la teoría de la relatividad. De hecho, el otro día intenté explicársela muy por encima y pareció entenderla al instante, diría que ni se sorprendió de las consecuencias de la misma.

Es como si ella ya viviera sabiendo las implicaciones del relativismo, concretamente aquellas que afirman que el tiempo transcurrido en un evento depende del observador que hace las mediciones.

Como sabemos, la velocidad relativa con la que el observador se desplaza con respecto al objeto observado influye en el tiempo medido por uno y otro. Sin embargo, en este caso particular podríamos decir que las velocidades de los sujetos observador (yo) y observado (mi novia) eran prácticamente iguales, por lo que el tiempo transcurrido para ambos debería ser el mismo. He ahí el fallo de la teoría: Einstein no tuvo en cuenta que mientras el experimento toma lugar, si el objeto observado está maquillándose, el tiempo también es relativo.


Vándalos con clase II: Llega la paradoja

(...Continuación de Vándalos con clase I...)


Supongamos que el conjunto de todas las proposiciones estuviera formado por una única proposición, G, y recordemos que hemos deducido que G sólo puede ser Falsa. 

También quedamos en que G es equivalente a "La única verdad es que todo es mentira", que equivale a "Del conjunto formado por todas las proposiciones del cálculo proposicional, la única verdadera es que todas esas proposiciones son falsas".

Veamos entonces que nuestro conjunto reducido se corresponde con el "todo" que aparece en G, que es Falsa (o mentira). ¡Horror!. O sea que, "todo" es mentira y G es Falsa: se está diciendo una verdad, al ser todas las proposiciones mentira. Por tanto, vemos que G está afirmando algo que es cierto, por lo que G es Verdadera.

Pero si G es Verdadera, volvemos de nuevo al primer caso que se estudió en este artículo. G sería la única proposición y estaría afirmando de sí misma que es Falsa, lo cual nos lleva una vez más a la contradicción indeseada.

Es decir, que en el caso en que G sea la única proposición de todo el conjunto al que ésta se refiere, G no es ni Verdadera ni Falsa, convirtiéndose en una paradoja digna del mismo Kurt Gödel. 


Lo que yo pienso y lo que a mí me parece

Un buen ejercicio de humildad es contar cuántas veces dices la palabra "yo" cada vez que abres la boca para decir algo. Un buen día me lo propuse y el resultado fue de unas veinte veces.
Teniendo en cuenta que hablé con unas diez personas a lo largo del día, tocarían a unos dos "yoes" por persona. 
Además, no es sólo el número de veces sino que la posición de la oración donde aparece el pronombre de marras suele ser bastante privilegiada: decimos "Yo" y luego el resto de la frase, como si esa introducción fuera algo inevitable en nuestro discurso. ¿No os suena lo siguiente?: "Yo, una vez, ...", "Yo diría que...", "Yo pienso que ...", etc.
Esto me lleva a pensar lo siguiente: ¿realmente hablamos para comprender a la otra persona? ¿o sólo queremos contar nuestras experiencias, siendo el discurso del interlocutor un simple hilo conductor?


Vándalos con clase I

Mientras paseaba por Madrid sin rumbo fijo leí un grafiti en una pared:

"La única verdad es que todo es mentira"

Aún con rechazo hacia el grafiti, agradecí leer esto pues ya tenía algo que pensar en mi caminata. Mi primera impresión fue la de tildar de sinsentido el mensaje aunque, dejando de lado las razones que motivaran al autor a escribirlo, me puse a pensar más profundamente acerca del significado del mismo.hola


No pude evitar buscarle el sentido lógico a la proposición. En el cálculo proposicional, una proposición como la escrita en la pared es susceptible de ser Verdadera o Falsa. Son proposiciones oraciones como las siguientes:

a) "Ana y Braulio son primos"

b) "Si tocas el fuego, te quemas"

c) "Si llueve, el suelo de mi patio se moja"

d) "Las personas pueden respirar debajo de agua"

Suponiendo que Ana y Braulio son primos, que tocamos el fuego sin ningún guante especial, que mi patio no está techado y que no tenemos ninguna bombona de oxígeno, las proposiciones a, b y c son Verdaderas, mientras que la proposición d es Falsa. Es sencillo.